Si un juego ha conseguido convertirse en una de las mayores sorpresas de la industria este verano ese ha sido Fall Guys. Mediatonic, con la ayuda de Devolver Digital, han conseguido que un juego cuyas premisas son muy básicas se haya convertido en uno de los mayores pelotazos de ventas de los últimos tiempos.
Uno se podría preguntar cómo un juego de “carreras” y pruebas que podrían parecer absurdas puede haber generado tanto interés. Bien, lo mismo se podría decir de Humor Amarillo (El castillo de Takeshi), ese programa de televisión antológico que nos hacía estar enganchados a la pantalla los fines de semana desternillándonos de risa. Y si entonces veíamos concursantes desdichados pasándolo mal en todo tipo de pruebas, en Fall Guys nos toca ponernos en la piel de enormes gominolas que deben competir para llegar a la meta o superar determinadas pruebas.
Y así con un estilo artístico ultra colorido, que encaja en la imagen que tenemos todos de un mundo “dulce” y de caramelos, Fall Guys nos ofrece la posibilidad de competir junto a otros 59 rivales en todo tipo de carreras de obstáculos o pruebas especiales para conseguir ser el primer clasificado. Todas ellas con el común denominador de intentar evitar caer al vacío. Ya sea por estamparnos con un obstáculo, calcular mal un salto o que un travieso oponente nos agarre y nos haga perder el equilibrio.
Y es que esa es parte de su gran éxito, ofrecer una jugabilidad irreverente combinada con competir con otros 59 rivales en partidas rápidas con situaciones potencialmente muy locas. Es cierto que lograr llegar a los primeros puestos es todo un reto. La mayoría de las veces es muy fácil ser eliminado en la primera prueba. Pero la gran ventaja es que, si nos eliminan, no pasa nada con volver a empezar.
Al fin y al cabo, cada vez que entramos a una partida se genera aleatoriamente una prueba de las diferentes disponibles, por lo que hay una gran variabilidad. Estas van desde carreras de obstáculos “normales” (si es que hay algo normal en este juego), a otros con la gracia añadida de que va subiendo el nivel de la lava y si te pilla, se acabó, partidos de “fútbol” en los que hay que sumar puntos colocando pelotas, hasta saltar por aros o robar colas doradas para puntuar.
A todo esto hay que añadirle otro gran elemento, que son las propias gominolas en sí. Estas se presentan de forma “plana”, pero la gracia está en poder personalizarlas. Ya sea con nuevos colores, patrones y después con todo tipo de disfraces. Sí, volvemos a recordar Humor Amarillo y como se vestían algunos concursantes para sufrir las mayores humillaciones posibles.
Cada día hay ofertas de objetos cosméticos que se pueden adquirir bien con la moneda interna que se obtiene al progresar en las partidas, o bien adquiriéndose con dinero real. Además, los desarrolladores ya han anunciado que el juego va a tener temporadas en las que añadirán nuevos modos de juego, escenarios y más elementos cosméticos. De hecho, justo la semana pasada revelaron que la nueva temporada tendrá temática de la Edad Media.
Podrá gustar más o menos, pero está claro que Fall Guys ha llegado para quedarse, más viendo sus abultadas cifras de ventas, horas de retransmisiones en Twitch y de jugadores activos en Steam o en PlayStation. Mediatonic se encuentra actualmente en proceso de contratación de más desarrolladores y personal. Así que si logran mantener el tipo y no morir de éxito vamos a tener tipos cayendo a trompicones para largo.