Blizzard ha publicado un diario de desarrollador donde nos cuenta la historia sobre Westmarch, la nueva zona que vendrá con la expansión Reaper of Souls para Diablo III. Esta ciudad fue el origen de una renombrada orden de caballeros, y en ella se encuentra una de las maravillas arquitectónicas conmemorativas de las conquistas del rey Rakkis, así que está tan llena de esplendor como de sangre de inocentes.
El imperio de Kehjistan había visto hambrunas, plagas y disturbios, pero fueron sofocados por la luz de una nueva fe que avivaba los corazones de los ciudadanos: Zakarum. Aunque muchos tachaban esta doctrina como falsa y traicionera, el emperador Tassara se dio cuenta de que apoyarla significaría un gran aumento de su reputación, así que la proclamó religión oficial, ganándose el favor del pueblo.
Pero por otro lado, sus competidores comenzaron a reunirse y amenazaron su posición en el trono de emperador. Tassara contaba, sin embargo, con uno de los conversos de Zakarum más sabios y curtidos en batalla: Rakkis. Este personaje llevó con su fuerza inquebrantable a la victoria a su pueblo, siendo una inspiración para todos ellos, con su espada de doble filo. Tassara vio que Rakkis podría ensombrecerle y le ordenó partir a recabar todo el apoyo posible en el oeste, con el fin de alejarlo de la ciudad. Su éxito fue tal que se erigió en la tierra conquistada una nueva ciudad: Westmarch, para conmemorar la misión que Tassara le había asignado.
Tras varias décadas de paz y prosperidad veladas por su poderío militar, Westmarch permaneció inmune a todo daño. Hasta la llegada de Malthael. El ángel de la muerte tomó como objetivo la ciudad, ya que se encontraba muy cerca de un gran tesoro, mayor que cualquiera de los que Rakkis obtuvo en su camapaña. Unas ruinas titánicas, perdidas y olvidadas por la civilización, una ciudad perdida de los Nephalem.
El poder que alberga esta ciudad es tan vasto como antiguos sus labertínticos pasillos, a salvo de ángeles y demonios. Los secretos sobre esta antigua protección están bien escondidos, y dada sus características, es donde Tyrael ha decidido guardar la Piedra de Alma Negra. Pero este acto no ha pasado inadvertido para todos… ¿Podréis, como Nephalem, honrar a vuestros antepasados y proteger las antiguas ruinas del mal que se avecina?
